Miguel Ángel Fuertes nos hace un repaso de su carrera, y nos da las claves de cómo nos encontraremos la animación en un futuro cercano y la formación en animación.
Siempre visionario, Fuertes es un generador de ideas incansable y un experto en técnica de animación. Adelantado a su tiempo, ya tiene claro cómo ha de ser el futuro y qué debemos hacer para adaptarnos si queremos alcanzar nuestros sueños dentro de la industria de la animación. A nivel docente, mantiene la excitación por la enseñanza como el primer día, ya que es capaz de retroalimentarse de la energía que le transmiten los alumnos. Aquí os dejamos sus impresiones.
Lightbox Academy: ¿Qué fue lo que llevó de dedicarte profesionalmente a esto?
Miguel Ángel Fuertes: Quería conocer a Walt Disney en persona, hablar con él y formar parte de los maravillosos mundos de belleza que creaba. Mickey Mouse, Donald y Pluto me irritaban. Me gustaba su imaginación y su forma de crear emociones con imágenes, su forma de contar historias. “Bambi” para mí, siempre será una obra maestra del cine, al igual que “Fantasía” Se puede decir, que yo nunca quise hacer la animación por sí misma. Yo quería hacer mundos diferentes, y hacer animación me acercaba más a Walt. De la animación, me interesaba más su significado, y las emociones que podía provocar, que la técnica en sí.
LBA: ¿Cuándo comenzaste en este sector y cuáles fueron tus primeros proyectos?
MAF: Empecé haciendo Pica-Piedras para Hanna-Barbera. Lucky Luke, Jana de la Jungla, Trollkins, Pátula y muchas otras series de televisión. Luego monté mi propio estudio y realicé trabajos para Equip y Renfe. Desarrollé el proyecto de “Súper López” con mi productora Elia Méndez, que iba a llevar música de Nacho Cano y fondos 3D en una serie de TV 2D. Y justo entonces, fue cuando me llegó el contrato con Steven Spielberg.
LBA: ¿En qué proyecto has disfrutado más y por qué?
MAF: En todos por diferentes razones. O por la gente que he conocido, o por los países en los que he vivido, o por los directores con los que hice amistad, o por el reto de los personajes o por la importancia del proyecto, pero siempre, por lo que significaban para mí. Siempre he dicho que hay que ponerse los guantes y buscar los diamantes en la basura. Están ahí.
LBA: ¿En qué proyecto estás ahora mismo?
MAF: Estoy ayudando a Carlos Baena con su corto desde hace ya 2 años y pico, desarrollando un proyecto de imagen real y animación con unos productores Americanos, aprendiendo a escribir guiones y novela, y desarrollando mis propios proyectos.
LBA: ¿Cómo ves el futuro de esta industria?
MAF: Aún le queda mucho por recorrer, y espero que el nombre cambie a “industria de animación”, porque si no, le faltaría el alma, ya que consiste en la unión de muchas disciplinas artísticas, no sólo industriales. Pero esa misma industria, a la vez que impulsa la animación, paradójicamente la impide explorar nuevos territorios. Veo que la animación convencional y 3D están atrapadas en personajes cómicos de caricatura, porque cuanto más realistas se vuelvan los personajes, menos animadores se requieren, y o los actores o los softwares son los que hacen el trabajo. Esto cambiará. Puede que en librerías de movimiento y acting, que no necesiten tantos animadores, ya que la principal debilidad de la animación para la industria es que aún es cara y lenta de hacer, y los animadores se quejan mucho, de acuerdo con los productores. Veo que se mezclarán técnicas y que se resucitarán actores ya muertos mediante diversas tecnologías y se harán películas episódicas con ellos. Seguro que artistas como Chaplin, Garbo y muchos otros volverán a la pantalla una vez resueltos los problemas de uso de imagen que conllevan. Puede que la animación un día, sea simplemente un plug-in, y los animadores que queden en activo, serán como actores, o artistas únicos que hacen un tipo de animación muy diferente valiéndose de la tecnología, con lo que serán más directores o creativos.
LBA: ¿Por qué te gusta la docencia?
MAF: La docencia puede llegar a abrumar y ser cansada a largo plazo si es únicamente académica y técnica. Pero es revigorizante, y excitante, cuando cuando se convierte en una aventura de descubrimiento en equipo y no es sólo una charla profesor alumno. En mis clases casi nunca hablo de técnica de animación. Para eso hay otros profesores.
LBA: ¿Qué le exiges a un alumno?
MAF: Que tenga curiosidad y deje fluir su visión y su creatividad, Que su meta no sea sólo querer meterse en un puesto en una caja en un estudio importante. Animará como le digan en ese estudio y se perderá la variedad de lo que es posible. Eso sería como seguir a Forrest Gump. Que aprenda todo lo que pueda y abra sus miras para descubrir todas las posibilidades que ofrece el mundo cinematográfico, no sólo el apartado animación, que es sólo una técnica. Como dijo Glen Keane: “Soy un artista que ha decidido hacer animación en este estudio en este momento”. Es decir, que no se limitaba a ser un simple animador, sino que está abierto a todas las posibilidades del arte creativo en general.
Miguel Ángel Fuertes ha trabajado para directores como Ang Lee, Steven Spielberg, George Lucas, Juan Campanella, George Miller, Stephen Sommers y James Cameron, entre otros. Sus proyectos más renombrados abarcan desde E.T., El extraterrestre, Star Wars, Episodio I, La Amenaza Fantasma, Avatar, Crepúsculo o Futbolín. Fuertes compagina sus proyectos personales con la impartición en Lightbox Academy del Workshop “El Contraste como Única Regla de Animación”, en el que desvela el secreto de lo que realmente es importante a la hora de animar.
